El Presidente Sebastián Piñera se está moviendo rápidamente para tratar de evitar la recurrencia de las protestas sociales que dañaron a su gobierno en el 2011. Lo primero que hizo Piñera al retornar de sus vacaciones fue despachar a dos ministros a la región sureña de Aysén (Región XI) el 20 de febrero para tratar de cortar de raíz una protesta sobre el alto costo de vida, especialmente los costos de los combustibles, y el pobre estado de las instalaciones de servicios de salud pública. En esta misma época el año pasado, irrumpió una protesta similar en la vecina Magallanes (Región XII). El gobierno fue lento en reaccionar entonces, y eso fijó el tono para un año de movimientos de protestas, particularmente las prolongadas demostraciones estudiantiles, en las que el gobierno nunca parecía estar en control de los eventos.End of preview - This article contains approximately 697 words.
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