Las hostilidades entre el gobierno de la Argentina y la corte suprema se han reanudado. La última disputa es sobre el rol del presidente de la corte suprema, Ricardo Lorenzetti, y la salud de otro juez, Carlos Fayt. Aunque la mayor parte de los jueces han sido designados por el Frente para la Victoria (FPV), la facción gobernante del Partido Justicialista (PJ, Peronistas), en el poder desde el 2003, sus decisiones no han sido satisfactorias para el gobierno, y la Presidenta Cristina Fernández ahora ve a los jueces como muy cercanamente alineados con la oposición.End of preview - This article contains approximately 665 words.
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