El Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, hizo una serie de significativos gestos a las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) durante la última semana con miras a agilizar las conversaciones de paz en Cuba, pero no podían comparar con el impacto que tuvieron una serie de bombardeos militares, que ya han costado la vida de unos 40 guerrilleros. Las Farc rápidamente abandonaron el cese unilateral al fuego indefinido declarado que habían declarado el pasado diciembre. Mientras que las guerrillas insistieron en su continuado compromiso con el proceso de paz, si su probable retaliación cobra igual o mayor número de víctimas militares, la administración de Santos se vería obligada a suspender las conversaciones.End of preview - This article contains approximately 1601 words.
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