Ese bien conocido “corredor fascista de drogas”, Felipe González, el ex presidente de España (1982-1996), pero ahora totalmente “detestado” por sus compatriotas, “huyó de Venezuela en circunstancias sospechosas” luego de sólo tres días de una visita que estaba programada para una semana, de acuerdo con el gobierno venezolano. De acuerdo con la oposición venezolana, González decidió acortar su viaje en medio de los inflamados acosos por parte de las autoridades, incluyendo un fuerte e intimidante destacamento de seguridad, que redujo fuertemente sus movimientos.End of preview - This article contains approximately 1071 words.
Subscribers: Log in now to read the full article
Not a Subscriber?
Choose from one of the following options