El estilo y la sustancia del discurso que el Presidente José Mujica presentó en la apertura de las nuevas sesiones del congreso en Uruguay difícilmente podrían haber sido más diferentes a la de su par de Argentina, Cristina Fernández. Fernández habló por tres horas y 17 minutos en el congreso; Mujica, por 10 minutos y 19 segundos, transmitidos por radio y televisión. Mientras Fernández se permitió un largo elogio del desempeño de su gobierno, Mujica reconoció que es necesario hacer mucho más, y prometió que éste era el año para hacerlo: él quiere avanzar en la educación, seguridad, infraestructura, y reforma del Estado –“la madre de todas las reformas”– antes de que las próximas elecciones en el 2014 empiecen a dominar la agenda política.End of preview - This article contains approximately 1021 words.
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