El Presidente electo de México, Enrique Peña Nieto dijo que había tenido “una cordial y muy productiva” primera reunión con la Presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, la semana pasada. Con la estrella económica de México en ascenso, y la de Brasil supuestamente declinando –al menos en la (cada vez más inestable) opinión del capital especulativo financiero internacional– Peña Nieto presionó en Brasil el compromiso de México con una agenda liberal de libre comercio y enfatizó la necesidad de una integración económica regional más profunda.
End of preview - This article contains approximately 1023 words.
Subscribers: Log in now to read the full article
Not a Subscriber?
Choose from one of the following options