La opositora ultra-conservadora Unión Demócrata Independiente (UDI) ha tenido que cargar con la peor parte de la censura por la financiación ilegal de las campañas electorales por parte el banco de inversión, Penta. Recientemente, el escándalo ha forzado al presidente de la UDI, Ernesto Silva, a emitir una disculpa pública, pero su acto de contrición fue compensado por varios golpes calculados que asestó a la izquierdista coalición gobernante, Nueva Mayoría, que, él sostiene, es tan culpable como la UDI de irregularmente financiar sus campañas. La UDI se abalanzó sobre las revelaciones de esta semana de que hubo una cena para recaudar fondos para la Nueva Mayoría abordo de un lujoso yate en Nueva York, en septiembre de 2013, en medio de la campaña electoral. La Presidenta Michelle Bachelet se vio forzada a distraerse en su visita a EU para emitir una declaración negando que nada impropio haya ocurrido a bordo del yate.End of preview - This article contains approximately 1148 words.
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