La visita del Papa Francisco a Cuba y a EU esta semana ha sido ansiosamente anticipada desde que trascendió el pasado diciembre que él había jugado un rol fundamental en el acercamiento diplomático entre los dos países, amargamente opuestos por más de medio siglo. Pero incluso así, con tres visitas papales en los últimos 17 años, el momento más trascendental en La Habana llegó el día después de que el Papa Francisco partiera hacia EU, cuando el Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se reunió con el líder de las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc). Un apretón de manos entre Santos y ‘Timochenko’ (Rodrigo Londoño Echeverri) lucía tan improbable como entre el Presidente de Cuba, Raúl Castro, y su par de EU, Barack Obama, pero, junto con el anuncio del más significativo avance en los anales de cualquier proceso de paz con las Farc, esto ha allanado el camino para la resolución de otra gran irresoluble disputa en el hemisferio.End of preview - This article contains approximately 1377 words.
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