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Informe Latinoamericano – 29 de octubre de 2015 (ISSN 1741-7317) (IL-15-43)

GUATEMALA: Morales, el que ríe último…

Un comediante y actor sin experiencia en un cargo público asumirá la presidencia de Guatemala el 14 de enero del 2016 por un periodo de cuatro años. Fue precisamente esta falta de experiencia y su percibido distanciamiento de la estructura política tradicional, cuya credibilidad ha sido cuestionada a raíz de una serie de escándalos de corrupción que finalmente obligaron a Otto Pérez Molina a renunciar como presidente el mes pasado, la clave de la aplastante victoria de Jimmy Morales, del pequeño y conservador de Derecha Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación), en la segunda ronda de las elecciones presidenciales del 25 octubre. No fue nada sorprendente que Morales –cuyo eslogan de campaña fue ‘Ni Corrupto, ni Ladrón’– desde entonces haya reiterado su promesa de combatir la corrupción. Además de la preocupación que existente acerca de la falta de sustancia en las propuestas contenidas en su plan de gobierno [IL-15-41], los think-tanks y las organizaciones de la sociedad civil locales se preguntan hasta qué punto será posible que cumpla con esta promesa, teniendo en cuenta que el FCN-Nación no tendrá el control sobre la legislatura unicameral de 158 miembros, sin mencionar las preocupaciones existentes sobre la impunidad que rodea a algunos de sus miembros.

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